Este lunes, 27 de noviembre, se celebra la festividad de San José de Calasanz, patrón de los maestros, razón por la que publico este artículo dedicado a la importancia de los maestros en la vida de la gente, de los niños, y lo importante que es la educación para el futuro.
Relacionado con este vídeo, y viendo qué pasaría en una sociedad si no hubiera maestros, o si no existiera ningún tipo de administración que se encargara de organizar la educación, me acordé de lo que ha pasado recientemente en Argentina, donde ganó en las elecciones presidenciales el economista y candidato ultraderechista Javier Milei, quien entre sus locas propuestas para reducir el déficit del 140% de su economía, llevaba la desaparición de varios Ministerios, como el Ministerio de Sanidad o el de Educación, para dar ese dinero presupuestado directamente a los padres, para que lo gasten como mejor consideren, quién sabe cómo y dónde, si no hay administración que organice nada. Y así "confía" en que el sistema se organice sólo. Flipas. Veremos cómo lleva esto a cabo exactamente.
Como buen liberal, este señor considera la educación pública como un gasto, cuando en realidad no se da cuenta que es una inversión para el futuro, un dinero que pagan las empresas y ciudadanos en forma de impuestos, para que la administración eduque y forme a las nuevas generaciones que trabajen el día de mañana.
Hace unos años ganó Bolsonaro en Brasil, porque con mentiras metieron a Lula en la cárcel. Mentiras que ya se demostraron falsas. En el camino, Brasil pasó a desproteger miles de hectareas de bosque del Amazonas, porque decía que esto no era patrimonio de la humanidad. Sí, del que sirve para que respiremos. Porque decía que Brasil tenía derecho a desarrollarse y cultivar cereales para biodiésel por encima de tener que mantener los bosques. Quizá a este señor eso de que los seres vivos necesiten oxígeno para vivir le parece secundario.
En su día Bolsonaro entró en disputas con el Papa Francisco por el Amazonas, lo mismo que ahora también Milei le ha criticado e insultado gravemente, no sólo diciéndole "imbécil" sino que "es el representante del maligno", y todo ello pese a ser también argentino.
Con los candidatos ultraderechistas pasan estas cosas, que la gente los vota como de broma porque son populistas y les parecen lo mejor, hasta que se dan cuenta de la barbaridad que han hecho y tienen que aguantarse varios años con ellos. Argentina ahora tendrá que pasar por esta prueba y esperemos que no les salga demasiado caro el experimento.
En su ideario político, quizá se piensa que eliminando estos Ministerios se ahorrará el suficiente dinero como para salvar su economía, y así quienes quieran curarse o quieran que sus hijos estudien, tendrán que pagárselo, como ocurrió por ejemplo en España durante la guerra, o como ocurría con la Sanidad en EE.UU. (desde 2010 gracias al Obamacare esto se solucionó).
Hay quien no aprende del pasado. Ya lo dijo Derek Curtis Bok, ex presidente de la Universidad de Harvard, y antes que él el inventor y ex presidente norteamericano Benjamin Franklin: "Si crees que la educación es cara, prueba con la ignorancia". Con el tiempo veremos cómo acaba este experimento.
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