Las elecciones gallegas de este 2024 no han cambiado mucho la situación, pues el presidente sigue siendo el mismo. El PSOE de Galicia ha bajado 5 escaños y también dos el PP aunque sigue manteniendo la mayoría absoluta. Se podría decir que el BNG ha sido el vencedor moral con 6 diputados más y el PP el vencedor real al poder seguir gobernando en solitario.
Ahora bien, aunque ahí no cambiará nada, sí me gustaría poner el foco en otra batalla algo más inferior en categoría, pero que sin duda es significativa, y es la lucha tonta que han tenido Sumar y Podemos, puesta de manifiesto desde que los diputados del Congreso de esta última formación, abandonaron el grupo de Sumar para irse al Grupo Mixto.
A falta del voto del CERA, Sumar ha tenido 28.171 votos, que es el 1,90% y Podemos 3.854, que es el 0,26%. Si hubieran ido bajo la misma formación, eso serían 32.025 votos que sería el 2,16% de los votos. En definitiva, unos datos muy similares a los obtenidos por Vox con 32.493 y el 2,19% de los votos, pero que al ir separados, no han servido de nada, ni los de los unos (afortunadamente) ni los de los otros tampoco.
Haré una breve mención al partido D.O. que es de Ourense y que con 15.312 votos y el 1,03% sin embargo sí que obtiene un escaño. Cosas del Sistema D'Hondt.
Un conocido, ex del PSOE, ahora en Podemos, me aseguraba cosas como que ellos eran los únicos representantes de la verdadera izquierda, que ellos iban a resistir, que ellos se reúnen y debaten y votan, porque tienen infraestructura, mientras que Sumar... pues no. Sumar es un conglomerado de partidos que se juntaron para las Elecciones Generales de 2023 y ahí sigue. Igual que se juntaron en su día muchos pequeños partidos para formar la UCD, y eso acabó como acabó, quizás en Podemos se piensan que ellos van a resistir porque sí que tienen su propio partido mientras que los demás no, y acabarán peleándose.
El problema es que en Podemos no saben que la gente se pelea cuando hay poder y hay que repartirse cargos y competencias, cuando hay que hacer cosas y unos quieren mandar por encima de otros. La diferencia es que, a la vista está, Sumar no ha conseguido ni un escaño, y Podemos menos aún.
La impresión que me daba cuando hablaba con este conocido, al margen de su particular forma de ser y explicarse, es que ellos se pensaban que eran los únicos, los elegidos, los ungidos, y los demás sólo querían quitarles su partido que tanto les había costado crear. Todo sea dicho, también a base de fagocitarse otros como por ejemplo el PCE. Pero eso no lo ven.
Podemos surgió del 15-M, aunque la idea era que surgiera otro partido, el llamado partido X, pero eso no fraguó. Ciertamente Pablo Iglesias fue más listo, pero al final hizo lo mismo que Albert Rivera. Este se cargó su propio partido con aquello de pactar sí o sí con el PP, pues la gente no es tonta y vio claro de qué iba aquello, lo cual remató cuando sacó un adoquín en el debate de la tele y un perrito que olía a leche (la leche que se dio la olió bien, sin duda).
Diez años después de que surgiera Podemos, ¿qué queda de todo aquello?. Visto desde fuera, también se podría decir que Pablo Iglesias se cargó el suyo a base de autosabotearse y quitarse del medio a otras figuras del partido que se fueron a Más Madrid y Más País, e incluso más recientemente incluso echando a Monedero de Canal Red, así como tuvo repercusiones toda la campaña mediática del asunto del chalet de Galapagar que los medios fomentaron día tras día. Que yo no digo que no tuviera derecho a vivir ahí o donde quisiera, pues se lo paga con su dinero y de sus herencias, pero ya sabemos que el voto de la gente de la izquierda no perdona ciertas cosas por muy legales que sean, mientras que el de la derecha está acostumbrada a las golferías y consienten todo eso y más.
La extraña decisión de dimitir como vicepresidente para irse a la Asamblea de Madrid y también dimitir luego de ahí, fue sin duda un cúmulo de decisiones muy erróneas que provocaron la situación actual. Él fue quien puso a Yolanda Díaz y quien la propuso como candidata. Pero luego su creación no le pareció bien porque quizá tenía vida propia y pensaba por sí misma. A mi modo de ver ella hizo lo que tenía que hacer, pues sin duda tuvo claro que la desunión de la izquierda sólo sirve para que la derecha tenga más poder. Sin embargo Podemos, que surgió también con esa idea, de absorber al resto de partidos y pequeñas formaciones, no vio bien ser también absorbido por esta nueva formación.
Las recientes salidas y dimisiones de dirigentes de Podemos por la decisión de salirse de Sumar, no dejan lugar a dudas de que quizá ese ansia de protagonismo de los dirigentes de dicho partido, no fue la mejor idea. Sin duda que cada cual tendrá sus propias opiniones al respecto pero esto es lo que yo veo.
Yo, que fui de los que en su día prefería un acuerdo del PSOE con Podemos antes que con Ciudadanos (y a las pruebas me remito de lo que era Ciudadanos realmente), no puedo sino ver con cierta pena lo que le pasa ahora a este partido, pero lo peor de todo es la actitud que tienen y mantienen. Porque así con esos encabezonamientos de creerse los mejores, y negando a los demás, no se puede conseguir nada. Ahí tienen los resultados. Ahora tienen sus esperanzas en las elecciones europeas, donde no hay divisiones de provincias, y todos los votos valen lo mismo. Han caído tanto que ya se limitan a pensar como Ciudadanos, para ver si siguen siendo algo o están más que solos, pero pese a ello, siguen siendo tan obtusos de presentarse solos para medirse con Sumar a ver qué pasa. Es muy triste cuando se ve que hay gente que no se da cuenta de la realidad.
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